domingo, 7 de agosto de 2016

Todos podemos traicionar el Evangelio


Todos podemos ser traidores al Evangelio

Católicos y no católicos, laicos y clérigos, todos si dejamos a Jesús, si no acudimos al Espíritu Santo, si no buscamos ayuda en la oración, en las fuentes,  en la Escritura si vamos a sociólogos, psicólogos,  que muy respetables pero en relación con Dios con el Evangelio no pintan  nada,  y, por desgracia se ha hecho muchas veces

Si ponemos nuestras ideas nuestra inteligencia por encima de la Revelación, si ponemos nuestras tradiciones costumbres por encima de la Palabra, del bien del Cuerpo místico

Si damos preferencia a revelaciones privadas, a cultos, a devociones antes que al espíritu del evangelio

Si damos preferencia a lo dicho por pastores

A nuestros gustos

Si queremos ser aceptados y estar a bien con el mundo con la sociedad

Ser buena gente de izquierda

Ser buena gente de derecha

Si olvidamos que sólo se adora a Dios, Único Absoluto

Si, todos yo la primera, podemos traicionar el Evangelio

La promesa de Dios




Dios prometió reunirnos  y lo hará

Dios siempre cumple su promesa, no falla nunca

Dios es veraz es la Verdad no miente, luego si lo dijo lo hace

Dios es Omnipotente, lo puede todo, por tanto nada se lo va impedir

Dios es Amor

Dios es Vida,  no podemos decir, y, si se muere pues no, no muere

Por tanto nos reunirá, ya lo dijo en el AT, por boca de sus profetas
Isaias, Jeremías, Ezequiel,  lo repitió por su Hijo, “Habrá un solo rebaño y un solo Pastor”

Eso si, no dijo si en esta tierra o en la Tierra Nueva en la Nueva Jerusalén, pero si que seremos uno, como ellos son Uno, que ya lo somos pues formamos parte de Cristo, de Jesús por el bautismo