La verdadera religión

La verdadera Religión 

“Porque la verdadera religión no es huida ni escape, ni escapatoria, aquí hijas mías se ha de ver el amor, que no a los rincones sino a la mitad de las ocasiones”. Teresa  de Jesús

Cuánta razón tiene la Santa castellana, y, cuantas veces la he usado, la hemos usado, como anti depresivo, como amuleto

La religión verdadera, la verdadera religación, unión con Dios, con el Dios vivo, no es huir de los problemas del mundo, de la sociedad, cuando Moisés, se va al desierto, huyendo de Egipto, allí lo atrapa la Mano de Dios, y, lo enfrenta con el problema de su pueblo que esta esclavizado, y, así uno a uno todos los personajes de la Biblia, por supuesto Jesús también,

Cuando los discípulos están felices en el Tabor, Jesús los vuelve al mundo presente tienen que bajar

Una religión que consista sólo en decir frases bonitas, o ver lindas imágenes, o que bonita la vida de San N, de religión verdadera nada, aunque sea en una cofradía, o, en la Iglesia N, que sea, es lisa y llanamente pura idolatría

Una oración que no me enfrente conmigo misma, que no me lleve a ver lo que Dios me pide, que no me lleve a pedir por los otros no es tal

Una religión que se quede en lo malos que eran los romanos, y, lo buenísimos que eran los mártires, y,no lleve a dar testimonio a ser testigo de Jesús hoy, no es tal

Porque como dice Teresa de Ávila, la verdadera Religión es mostrar Amor a Dios, no en momentos especiales, sino siempre

No ir a la oración, a la piedad como a una droga, a un lenitivo, menos para convencer a otros, se hizo muchas veces que se dejen pisotear, porque después van al Cielo, pues no, porque quien pisotea a otro, pisotea la imagen de Dios hecha por el propio Dios

No ir para descuidar favores

No se puede dejar un vecino, un familiar, un amigo, un conocido tirado, para ir rezar, o ir al culto, a Misa

Y, entrando en el terreno ecuménico

Los cristianos, todos los católicos, los ortodoxos, los anglicanos, luteranos, reformados

No podemos quedarnos en siglo XI, XVI, XVII, etc. echándonos culpas unos a otros, y, quedándonos en una Iglesia, Comunidad, que usa La Palabra de Dios, manipulada para su propio provecho

Si no oír también donde nos reprende como Iglesia, y, ser conscientes que del pecado de la desunión, que es una herida infringida al Cuerpo de Cristo, que formamos todos, hoy en día el culpable no es  Lutero, ni Calvino, el culpable, somos tú  ortodoxo, anglicano, luterano, reformado, y, yo cristiana católica