El Amor de Dios es lo que impulsa la búsqueda de la
Unidad
Dios nos ama, nos ama tanto que nos dio a su Hijo, y,
nos ama a cada uno en especial
Y, nos ama a todos
Un padre, una madre humanos normales, quieren que sus
hijos se lleven bien, estén afectivamente juntos
A Dios pero en infinito le pasa lo mismo
Quiere que todos sus hijos estén juntos, es más quiere
que todos sus hijos adoptivos, sean uno solo, su Hijo natural, su Unigénito
Jesús
Por ello, en el momento de morir Jesús en La Cruz tomo
a todos los hombres por hijos, mejor dicho, ya lo había hecho al encarnase
Jesús en La Virgen María
Pero naturalmente, Dios esto no lo impone, Dios deja
en libertad al ser humano para aceptar ser su hijo en el hijo, o ser un esclavo
del mundo
La forma de enterarnos la oficial de ser hijos de
Dios, es el bautismo, todos los bautizados, los bien bautizados, no vale todo
bautismo, sabe que es miembro de Cristo e hijo de Dios, con Jesús forma la
Iglesia
Jesús solo tiene un Cuerpo, cuando murió cumpliendo La Escritura, no le quebraron ni
un hueso, pero sus brazos y, sus piernas se fueron dislocados para poder
clavarlo en la cruz
Tampoco nadie, rasgo su túnica
Sin embargo los cristianos si hemos hecho algo más que
dislocar su Cuerpo místico, lo hemos roto, hemos hecho pedazos su Túnica
Como decía un viejo libro de la escuela, si las ramas
de un árbol son de oro, las desgajadas también
Los acatólicos no son menos cristianos que los
católicos, y, al revés
Juan nos presenta a Jesús orando, porque todos los que
creyesen en él, fuesen Uno, como Él y el Padre, eran Uno, son Uno
Es decir que todos fuésemos un solo Cuerpo, y, esto
con una finalidad que el mundo al verlo creyera en él se convirtiera y pudiera
ser salvado
Que todos supieran que eran hijos de Dios en el Hijo
Para que la muerte de Jesús no fuese un fracaso
El Amor de Dios hizo nacer en La Iglesia el movimiento
ecuménico, que busca restañar las heridas de la desunión
El Amor a Dios, y, al hermano, al otro hermano, no
separado, hermano aunque aún falten muchas cosas que nos separa, mueve a los
cristianos a buscar La Unidad, con la oración, el estudio, la reflexión, el
trabajo
Porque el Amor a Jesús, no, nos permite ver su Cuerpo
con más heridas que tuvo en La Cruz
Y, por ello si hay que sacrificar lo que no es
esencial se sacrifica
Por ende, el espíritu del mal, el diábolo, el que
divide de ahí viene la palabra diablo
Quiere separar, separar cada vez más
Separar dentro de cada Iglesia, separaciones dentro de
La Iglesia católica, enfrentado a los fieles con el Papa, trayendo a colación
costumbres añejas de un pasado remoto
Separar no permitiendo los avances en La Unidad
Juzgando a miembros de otras Iglesias, o Comunidades
por sus errores del pasado, como si nosotros no tuviéramos para dar y regalar,
olvidando que cada época es cada época
Solo podemos tener una cosa en cuenta
La Unidad que no Uniformidad, viene de Dios
La búsqueda de La Unidad viene de Dios
La uniformidad, el inmovilismo viene del diablo
El rechazar la búsqueda de La Unidad viene del diablo
El crear corpúsculos puros dentro de La Iglesia para
seguir con modas, costumbres del pasado, rechazando por impuros o impíos a los
que las siguen o piensan de otro modo. Viene del diablo
El llamar a otro cristiano, hereje, papista, cismático,
viene del diablo
El llamarle hermano. Viene de Dios
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