Los exhorto

 

«Los exhorto a que se dejen conducir por el Espíritu (...). Si están animados por el Espíritu, ya no están sometidos a la Ley» 

Pablo escribe a los cristianos de Galacia, y les recuerda, les ruega, les mandá, que se dejen guíar por El Espíritu Santo, les recuerda que sí están animados por La Ruhah divina, ya no lo están por La Ley

Y, cuál es la diferencia, La Ley llevá a hacer las cosas por obligación, por deber, para evitar un castigo, por eso, hecha la Ley hecha la trampa, y no importa se traté de Ley humana o divina, la Ley lleva a intentar escaquearse, cumplir lo mínimo, con tal de evitar un castigo, pues listo.

Pero el amor no, el amor busca realizar la voluntad del amado, sin importarle nada, ni el propio cansancio todo le parece poco

Hay una vieja anécdota que lo puede ilustrar

Hace mucho tiempo

Es un día de lluvia torrencial, con caída de granizo nieve un frío que corta los huesos, se ven de vez en cuando relámpagos en el Cielo, un joven soldado pasea con su fusil al hombre frente a su garita, le  ha tocado guardia, un vecino que pasa cerca con su paraguas lo saluda sin hablarle, no puede hacerlo con la mirada, el joven responde del mismo modo.

Está que muerde, le ha tocado guardia, con semejante día, mira no se ve a nadie, se mete dentro de la garita, así no se moja, pero sale al poco tiempo, descuidar la guardia tiene un castigo severo, pero bueno, no hay nadie y si al salir se encuentra un superior le pide disculpas y pone una excusa por eso sale siempre con un pañuelo en la mano, como si fuese lo que iba buscar. Sí por el fuese hacía Rita, la guardia.

Unos días más tarde el mismo jovén, pero ya de paisano el día igual que el de la guardia no, peor nieva, hace un viento huracanado y ahi esta nuestro amigo, paseando arriba y abajo de un portal mirando, a ver si baja su amada, que parece tarda, el mismo vecino pasa y lo saluda, ahora con palabras

Ponte a cubierto que te mojas, cuando baje tu novia, ya te buscará.

No, estoy bien responde, solo son 4 gotas no me molestan

El motivo quiere está enamorado de la muchacha, se está mojando por amor

Cuando dejamos que sea La Ruhah divina la que nos llevé y nos dé fuerzas para descubrir la voluntad de Dios para nosotros cuando amamos, como le pasaba a Jesús, solo queremos saber que quiere Dios para complacerlo, todo se nos hace poco

Lo malo es que muchas veces, por no decir casi todas nos mueve la Ley, el miedo al castigo