Implicación ecuménica de ser nueva creación
Ser nueva creación es
haber sido recreado; por lo tanto es no portarse ni ser como en el
pasado
Si en Jesús hemos vuelto a ser recreados, hechos de
nuevo, porque Dios lo dice bien claro; “Todo lo hago nuevo”
No podemos andar ya, con rencores, ni rabias, ni
pensar en lo que sucedió hace, 1.000 años, 800. 500; ni de quien fue la culpa
Tenemos que perdonarnos, y pedir perdón, darnos la
mano, y empezar a luchar por intentar vivir el Evangelio, el Espíritu de las
bienaventuranzas, respetando nuestra diversidad, unidos en el reconocimiento de
Jesús, como Señor y Salvador, Dios hecho
hombre, Segunda Persona divina, testimoniando con nuestras obras nuestra Fe en
Jesús, y, orando juntos, para que Dios nos una en el Cuerpo de su Hijo que es
La Iglesia
Pero si andamos con odios, rencillas, con me hizo, le
hice, es un papista, es un hereje, sólo se salvan los míos, puede que aún no
estemos en el Nuevo Testamento, que no, nos hayamos enterado de que ya tuvo
lugar la Redención
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