Hoy 25 de enero conversión de San Pablo concluye el
Octavario por La Unidad
Comparto el Evangelio del día,
Juan 8, 12-20
“Jesús les habló otra vez diciendo: «Yo soy la luz del
mundo; el que me siga no caminará en la oscuridad, sino que tendrá la luz de la
vida.»
13 Los fariseos le dijeron: «Tú das testimonio de ti
mismo: tu testimonio no vale.»
14 Jesús les respondió: «Aunque yo dé testimonio de mí
mismo, mi testimonio vale, porque sé de dónde he venido y a dónde voy; pero
vosotros no sabéis de dónde vengo ni a dónde voy.
15 Vosotros juzgáis según la carne; yo no juzgo a
nadie; 16 y si juzgo, mi juicio es verdadero, porque no estoy yo solo, sino yo y
el que me ha enviado.
17 Y en vuestra Ley está escrito que el testimonio de
dos personas es válido.
18 Yo soy el que doy testimonio de mí mismo y también
el que me ha enviado, el Padre, da testimonio de mí.»
19 Entonces le decían: « ¿Dónde está tu Padre?»
Respondió Jesús: «No me conocéis ni a mí ni a mi Padre; si me conocierais a mí,
conoceríais también a mi Padre.»
20 Estas palabras las pronunció en el Tesoro, mientras
enseñaba en el
Templo. Y nadie le prendió,
porque aún no había llegado su hora.”
La Escritura, en concreto
entre otros el Salmo de la 1ª lectura, llama a Dios, luz del creyente, el Señor
es mi Luz, Jesús, se manifiesta como La
Luz que guía al hombre, como Dios. Quien sigue a Jesús, quien lo acepta
no va perdido, sabe lo que debe hacer, como vivir, por donde ir
Esto es asi, porque Jesús es
Uno con el Padre, Uno a que son dos Personas distintas. Jesús da testimonio de
si mismo, y, con Él da testimonio el Padre por medio de las obras que hace
En efecto al no conocer a
Dios, al Padre al haberse hecho un ídolo espiritual pero ídolo, un dios
vengativo, un dios como les conviene no pueden verlo reflejado en Jesús que es
Hijo del Dios verdadero, y, por tanto al tener una idea falsa de Dios rechazan
a Jesús
Pero nadie toca a Jesús hasta
el momento que el Padre ha fijado
Del mismo modo los cristianos
damos testimonio con nuestras obras hechas en unión con Jesús de que somos
hijos de Dios en el Hijo, pero chocamos
con la sociedad impía con el mundo, que no entiende nuestros valores, pues
nuestro Dios no es el suyo, el suyo es como dirá el Señor por San Pablo, sus
vergüenzas, el poder por el poder, el
sexo por el sexo, el dinero por el dinero
Al igual que Jesús, no
podríamos hacer nada bien, si el Padre no actuase en nosotros en cada uno, por
su Hijo Jesús
Dios quiere que echemos el
mal del mundo, y, para ello hemos de estar unidos
Hermano Roger de Taize acompáñanos en el camino de La Unidad
Madre Teresa de Calcuta acompáñanos en el camino de La Unidad
Saulo de Tarso (San Pablo) acompáñanos en el camino de La Unidad
Hermana y Madre, María de Nazaret acompáñanos en el camino de La Unidad
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