ejemplo cristiano de unos paganos

El Ejemplo cristiano de unos paganos 

Esta era la lectura  y la meditación del texto que se nos proponía el año pasado 2020, en el  sexto día del Octavario

Hechos 28, 1-2. 7

«Una vez a salvo, supimos que la isla se llamaba Malta. Los isleños nos tra taron con una solicitud poco común; y como llovía sin parar y hacía frío, encendieron una hoguera y nos invitaron a todos a calentarnos… Cerca de aquel lugar había una finca que pertenecía a Publio, el gobernador de la isla, quien se hizo cargo de nosotros y nos hospedó durante tres días».

De la lectura ya se puede colegir que los malteses pese a ser paganos, incluido el gobernador Publio, no eran como esos que llamandose cristianos vociferan contra inmigrantes y refugiados, diciendo que no les importa que se ahoguen en el mar; los malteses acogieron a Pablo y sus compañeros cuando naufragaron  y era un barco de prisioneros

Suele ser bastante común que quienes rechazan a exiliados, refugiados, al amparo de su color de piel, su religión, o su país sean también anti ecuménicos y hablen con desprecio, con indiferencia y hasta con odio de cristianos de otras Iglesias o Comunidades, y, claro esta si uno rechaza al propio hermano que es el otro cristiano, como va aceptar a otro de cultura o religión diferente

Pero cuando los cristianos acogemos del modo que sea a los que llegan en pateras o en otro medio buscando solo sobrevivir, estamos ya haciendo Unidad, y, orando al Padre para que  en el día por el señalado nos una en La Iglesia Cuerpo de Cristo su Hijo y el mundo crea y sea salvado.

Oración

Dios del huérfano, de la viuda y del extranjero, inculca en nuestros corazones un sentido profundo de hospitalidad. Abre nuestros ojos y nuestros corazones cuando nos pides alimentarte, vestirte y visitarte. Que nuestras Iglesias sean activasen acabar con el hambre, la sed y el aislamiento, y en superar las barreras que impiden acoger a todas las personas. Te lo pedimos en el nombre de tu Hijo, Jesús, que está presente en el más pequeño de nuestros hermanos y hermanas. Amén.

“Jesús es el Cordero de Dios que saca nuestro pecado”